La Iglesia de la Natividad es una de las iglesias en funcionamiento más antiguas que existen en la actualidad. La primera iglesia fue construida por el emperador romano Constantino en el siglo IV d.C., sobre la gruta donde María dio a luz a Jesús. Constantino y su madre, Helena, construyeron una magnífica y majestuosa iglesia adornada con hermosos mármoles y mosaicos.

Más tarde, durante el siglo VI, el emperador bizantino Justiniano construyó una iglesia nueva y aún más intrincada en el mismo lugar. Durante la invasión persa en el siglo VII, la iglesia se salvó de la destrucción. En el siglo XI, los cruzados izaron su bandera sobre la Basílica de la Natividad y la renovaron.

La entrada principal a la Iglesia de la Natividad se hizo gradualmente más baja y estrecha para protegerla de los invasores. Dos conjuntos de escaleras conducen a la Gruta de la Natividad, donde una estrella de plata de catorce puntas marca el lugar exacto del nacimiento de Jesús. Una inscripción en la estrella dice: Hic de Virgin Maria Jesus Christus Natus Est – que significa «Aquí nació Jesucristo de la Virgen María». La tutela real de la Iglesia es compartida por tres denominaciones cristianas: ortodoxa griega, católica romana y armenia.